Una conversación con Carlos Echevarría
Por Benjamín Román Abram Febrero 2015
« Mi
curiosidad por el espacio, y la libertad que me permitiría este para escribir
sobre otros mundos, me hizo decidir que El Planeta Olvidado sea una ópera
espacial »
Carlos,
me alegra poder entrevistarte. He leído tu novela, El Planeta Olvidado I, La
Liberación, además pude estar presente en tu disertación sobre la misma en la
Casa de la Literatura Peruana. Hay varios aspectos que han llamado mi atención.
Como el que hayas iniciado la escritura de esta en tu adolescencia para
publicarla a los veintidós años, pero no solo eso, sino que desde el inicio concebiste
una tetralogía. Otros puntos fuertes son el género y, ya desde una perspectiva
nacional, que uno de los protagonistas es un peruano y miembro de la fuerza
aérea, dicho esto cuéntanos sobre libro y cómo fue el proceso creativo.
El planeta olvidado es una
novela de ciencia ficción cuyo universo concebí y desarrollé cuando tenía diez
años. Empecé su escritura a los doce, con el claro objetivo de publicarla.
Decidí que fuera una saga de cuatro libros porque solo así podría plasmar una
historia tan larga como la que tenía en mente. Solo avanzaba la novela por
épocas, por ello, recién a los diecisiete años terminé de escribir el primer
volumen. Como había pasado tanto tiempo desde que la empecé, el proceso de
corrección tardó bastante, eliminé muchas páginas y reescribí otras. Publicarla
tampoco fue fácil, luego de varios intentos recién en el 2011 hice contacto con
la Editorial San Marcos y un año después salió a la luz.
¿Tienes
algún referente en la literatura de ciencia ficción o el cine?
La verdad es que yo empecé a
leer ciencia ficción después de desarrollar esta historia. Me encanta la saga
de “La Fundación” de Asimov, “El hombre en el castillo” de Phillip K. Dick,
“Dune” de Frank Herbert y entre las novelas peruanas, “Mañana, las ratas” de
Adolph, que siempre es una referencia.
Tal vez
algunos no sepan que en la ciencia ficción existen innumerables subgéneros. ¿En
marcarías tu obra en alguno de estos?
Mi curiosidad por el espacio, y la libertad
que me permitiría este para escribir sobre otros mundos, me hizo decidir que El
Planeta Olvidado sea una ópera espacial.
No quería que sea futurista, como otras historias de la ciencia ficción, por
eso resolví que se desarrolle en el presente, y con un escenario en que la
Tierra no conociese de la existencia de organizaciones espaciales. Así podría
describir el proceso por el que pasaría un planeta para formar parte de una
federación interestelar que ya existía.
¿Qué
estimuló tu imaginación?
La idea de la historia surge
a partir de los dibujos animados que veía cuando era niño, como por ejemplo
Dragon Ball. De la saga de Freezer tomé algunos elementos para crear a los
antagonistas: un conquistador de planetas que extrae los recursos de estos, o
que utiliza a los seres subyugados, como soldados, para seguir expandiendo sus
dominios.
¿Sigues
con el mismo afán del inicio?
A pesar de que han pasado
doce años desde que inicié la historia, y mi manera de pensar y escribir ha
cambiado, sigo con las mismas ganas de terminar la saga.
¿Y
qué pretendes con El Planeta Olvidado? ¿Tal vez entretener, motivar a la
lectura, un tema social puede estar entre líneas?
El principal objetivo que
tengo al escribir estas novelas es entretenerme a mí, ya que disfruto creando y
vivo las aventuras que relato. Por supuesto, también me gusta que me lean y que
disfruten con lo que hago, por lo que mi segunda razón para escribir es
entretener a los lectores El tema social siempre lo he tenido en mente, ya que
quiero describir cuál es el impacto que puede tener sobre nuestra cultura el
hecho de hacer contacto con vida extraterrestre. Analizar cuál es la respuesta
de los gobiernos ante la posibilidad de exportar sus recursos a otros planetas,
priorizando ciertos intereses, comparando estas actitudes con civilizaciones
que son mucho más adelantadas. También imaginar cómo sería la nueva estructura
de poder en la Tierra cuando doce humanos son seleccionados para representarnos,
y cómo algunos que pueden perder su influencia política y económica intentan
derrocarlos. Estos tópicos siempre los tuve en consideración, pero sabía que en
la edad que escribí el primer libro no los podía tocar de una manera profunda y
verosímil, por lo que al principio me centré más en la guerra, ya que la acción
es, en mi opinión, más fácil de tratar. Conforme avance los libros y mis
conocimientos, profundizaré más en las implicancias sociales de un primer
contacto. Puedo adelantar que lo empiezo a tratar en el segundo libro y se desenvuelve
aún más en el tercero, que ya lo estoy escribiendo.
¿Crees
que pueda ser llevada al circuito cinematográfico?
Creo que la novela es muy
visual y de hecho me encantaría ver la historia en una película, pero soy
consciente de que necesitaría muy buenos efectos especiales y, por lo tanto,
una gran inversión. Por ello, primero tendría que hacerse conocido el libro internacionalmente
para que le presten atención como para ser llevada a una película.
¿La
publicaras en formato electrónico?
En dos meses espero estar
publicando la segunda edición de El Planeta Olvidado I en formato digital,
mientras el segundo libro este año. Ambos en la plataforma de Amazon.
Considerando
que tus siguientes novelas, de la saga, las publicaras a otra edad, ¿mantendrás
el estilo de El Planeta Olvidado I que iniciaste tan joven, o dejarás que tu
prosa se plasme tal y como esté en dicho momento?
Dejaré que mi prosa se
plasme como esté en el nivel que escriba, pero siempre conservando la esencia.
Creo que puedo perfeccionar el argumento, los diálogos, desarrollar mejor lo
personajes y los pensamientos. En síntesis, hacer más verosímil la historia. Esas
mejoras harán libros de mayor calidad, y puedo hacerlo sin necesidad de cambiar
mucho el estilo. Cuando escribo otros temas sí me puedo dar la libertad de
explorar más recursos.
¿Escribirás
otros géneros? ¿Literatura general por ejemplo?
Ahora solo tengo en mente
otra novela de ciencia ficción, por cierto, muy distinta a El Planeta Olvidado.
He escrito algún cuento considerado como de literatura general, pero por el
momento no continuaré. Tal vez en algunos años.
¿Cómo vez al mundo editorial peruano?
Si bien existen muchas
editoriales, el mercado peruano para la literatura es muy pequeño, y eso es
debido a que en nuestro país la gente no tiene la costumbre de la lectura. Lamentablemente,
no veo que eso pueda cambiar en un futuro cercano.
Para
muchos, aunque lo deseen hacer, se les hace difícil escribir una novela.
Existen factores, como que simplemente la pluma se detenga en la palabra número
mil. Otros no tienen el tiempo. ¿Cómo es en tu caso, se te hace fácil?
La verdad es que se me hace
muy fácil las novelas, no tengo inconvenientes con la inspiración. Además, he creado
el argumento hace tanto que solo debo escribirlo y, en todo caso, el resto de
la historia se me va ocurriendo en el camino. Al final, siempre termino haciendo
más páginas de las que quiero o de las que mis editores consideran comercial.
Cuéntanos,
¿tienes un lugar favorito para desarrollar tus textos, un método de trabajo que
puedas compartir?
No tengo ningún método
especial para escribir. Lo hago en cualquier sitio y cuando tengo tiempo, ya
sea en mi computadora portátil o en el teléfono. Tampoco tengo problema en que
haya ruido o mucha gente a mí alrededor.
Tú estudias economía en una prestigiosa
universidad peruana (PUCP), una carrera profesional que tiene cierta distancia
de la literatura creativa. ¿Crees que al final te aleje de las novelas?
No me alejará de la
literatura, siempre me dedicaré a escribir; sin embargo, trabajar en mi carrera
me demandará tiempo y eso hace que uno sea más imaginativo para hallar un
espacio de creación. Eso me pasó con El Planeta Olvidado II, la que empecé a
escribir en mi smartphone.
Gracias
Carlos