EL CABALLERO TETRAPAP |
JORGE URETA (1990–Lima), 94 págs. EDICIONES ALTAZOR | 2014
Reseña por Benjamín Román Abram
El Caballero Tetrapap es una novela corta, de título misterioso y con una
introducción originalísima y acertada (al menos no he advertido alguna similar
a esta en algún libro que haya leído), ya que su exordio funciona como
prefacio, como resumen de la nouvele y
como un cuento. En dicha introducción un desequilibrado y exitoso joven detalla
las diez crueles tareas que va a emprender —no confundir con decálogo, salvo se
hubiera pretendido que sea un modelo para otros.
Sus personajes poseen características que rozan lo increíble, así criminales
lúmpenes cumplen con honor y a pie puntillas lo pactado con Gary, lo que con la
complicidad del lector saca adelante la historia.
Si bien posee muchos actores que diferencia a El Caballero Tetrapap del
cuento largo, tiene un solo protagonista. Los antagonistas carecen del mismo
peso, que en verdad, no es necesario. La actitud maligna del demente no cambia
en ningún momento, ni hay tiempo para que evolucione, tiene un plan y lo
ejecuta a pie puntillas. Al respecto, para mayor sorpresa, Jorge Ureta hubiera
podido dar un giro de tuerca incumpliendo alguna tarea de la agenda que se
plantea en la introducción. Además, en aras del orden, hacer que las faltas y
delitos del sujeto vayan siempre en progresión de gravedad, ya que en algún caso
no ha sido así. También creo que en lugar de diez tareas y diez capítulos, podrían
haber sido once.
Hacia al término de la obra se aprecia, en torno a la historia de
Eduardo Wong, un excelente uso del salto en el tiempo narrativo,
¿El protagonista ha hecho suyo un instinto por la muerte o realmente
solo está evitando sufrir un doloroso fallecimiento? ¿Lo motiva el placer de lo
vedado ya sea por educación o instrucción recibida? ¿Tetrapap, Ballestrinque
bronquiopolar? El lector tendrá que dar la respuesta a estas cuestiones al terminar
esta interesante nouvele, contenida
en sesenta y ocho páginas, la que recomiendo leer.